El juez envía a prisión a cuatro de los detenidos por el crimen del camionero en Caudete
Tres de los acusados admiten ante el juez que fueron a Caudete "para robar" al transportista y que al autor material se le fue la mano - El magistrado deja libres con cargos a un encubridor y a la mujer.
Los cuatro detenidos con mayor grado de implicación en el asesinato del camionero del Real de Gandia muerto en Caudete (Albacete) en 2014 ya han pasado su primera noche en prisión por orden del juez de Instrucción número 2 de Almansa. Se trata del acusado a quien se imputa haber planeado el asalto mortal, que se ha negado a declarar y que no estuvo en Caudete el día del crimen, y de los tres hombres que presuntamente cometieron el atraco alrededor de las tres y media de la tarde del 28 de noviembre de 2014 a las afueras del citado municipio albaceteño. Entre ellos figura el supuesto autor material del asesinato a tiros y cuchilladas, un vecino de Sueca que, entre otros sobrenombres, tiene el de «el loco».
Fuentes jurídicas han confirmado que los presuntos asesinos hicieron una encerrona a la víctima con dos vehículos, tal como recogen las diligencias de la Guardia Civil, cuyo secreto levantó ayer el juez poco antes de recibir a los seis detenidos. Uno de los coches, que era robado, fue encontrado días después en las inmediaciones de Sueca, totalmente calcinado por el fuego. El otro, que habían alquilado para ir a cometer el robo, fue devuelto a la compañía.
Según las citadas fuentes, al menos tres de los arrestados han aceptado declarar durante su comparecencia ante el juez instructor y han admitido que fueron a Caudete en busca de la víctima con la intención de robarle, sin especificar cuál era el botín. Además, aseguran que no existía un plan previo para acabar con su vida. Sin embargo, no supieron explicar por qué llevaban una pistola y un cuchillo, las armas con las que mataron a Francisco Javier Marcos Benavent, que tenía 40 años y dos hijos de 6 y 10, tras hacerle parar bruscamente su camión a la salida de una rotonda.
Incomunicados
Los seis detenidos, de cuyo arresto ha informado en exclusiva Levante-EMV, fueron llevados de forma escalonada al juzgado a partir de las 10.30 horas de ayer y, como suele ser habitual, el orden de comparecencia fue de menor a mayor implicación en los hechos. Todos llegaron fuertemente escoltados e incomunicados entre sí, para evitar que acordasen una versión común antes de ser llevados ante el juez.
Tras escuchar sus versiones y examinar el atestado del equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Albacete, el fiscal solicitó al juez el ingreso en prisión de los cuatro principales sospechosos, mientras que solicitó libertad provisional para el detenido en Alberic, acusado de encubrimiento, y para la única mujer inculpada, quien mantenía en el momento de los hechos una relación sentimental con la víctima. Ambos siguen acusados en la causa y deberán comparecer cada quince días antes el juez.
Fuente: levante-emv.com
