La autoescuela digital: un modelo que se afianza durante la pandemia

Imagen de la autoescuela digital
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Comunicados de prensa

/></p><p>La pandemia ha puesto en evidencia un sector que ha vivido <strong>siempre al margen de la actualidad</strong>, siendo un servicio que casi todos (<strong>por no decir todos</strong>) hemos necesitado en un momento de <strong>nuestras vidas.</strong></p><p><strong>Con el confinamiento</strong>, se acabaron las clases presenciales en las autoescuelas, lo que ha puesto de manifiesto la ineficiencia de las mismas, <strong>más aún cuando la CNMC</strong> ha manifestado que la educación vial no requiere de presencialidad. Esto se ha traducido en un incremento de las matrículas en autoescuelas digitales.</p><p><strong>Desde el principio de la pandemia</strong>, las autoescuelas han vivido un crecimiento mensual <strong>del 20%, llegando a copar un 10% del mercado</strong> de la formación vial en el año tan complicado que hemos vivido.</p><p><strong>Una digitalización sin vuelta atrás</strong></p><p>Si algo ha demostrado<strong> la pandemia,</strong> es que la educación vial no tiene por qué ser presencial. La teórica se puede <strong>hacer 100% onlin</strong>e. Para ello, la autoescuela digital reduce el tiempo de desplazamientos, evita tener que pagar <strong>gastos de gestión innecesarios</strong>, permite una educación individualizada ,-al ritmo del <strong>alumno y no de la clase</strong>-, sin escatimar en el seguimiento pedagógico por parte de profesores de <strong>formación vial.</strong></p><p>Para la parte práctica, plataformas online <strong>como la de Onroad</strong> permiten poner en contacto de forma directa profesor y alumno, no limitando geográficamente la oferta a los lugares en los que existe una autoescuela, y permitiendo a la<strong> España</strong> vacía tener un servicio que, de otra forma, sería impensable (<strong>no se puede poner una autoescuela en cada pueblecito de España</strong>).</p><p>Si la educación vial no requiere de presencialidad,<strong> ¿Para qué están las autoescuelas físicas?</strong> Curiosamente en España, el Reglamento de Autoescuelas <strong>(y a pesar de ir contra de la legislación europea, en concreto la Directiva de Servicios)</strong>, es obligatorio tener un local en cada provincia en la que quieras dar clases prácticas a alumnos, algo que ha sido tácitamente derogado por una normativa de rango legal posterior. El abogado Miguel Temboury Redondo ,<strong>-ex Subsecretario del Ministerio de Economía y Competitividad-</strong>, ha realizado un informe exhaustivo al respecto.</p><p>Con todo, se debe considerar<strong> ilegal obligar a las autoescuelas</strong> a abrir un local físico en cada provincia para poder dar clases prácticas. Además, para abrir una autoescuela te ponen tantas <strong>trabas</strong> (que se incrementan hasta el infinito cuando se trata de poner en diálogo a las diferentes <strong>Jefaturas Provinciales de Tráfico</strong> y servicios autonómicos) y alargan tanto los plazos, que el <strong>empresario pierde una ingente cantidad de tiempo y dinero</strong> en este proceso. Simplemente desplazando el control del local a la figura del profesor, <strong>la DGT</strong> podría permitir el desarrollo de un modelo viable de autoescuelas sin perder un ápice de control sobre la<strong> calidad formativa.</strong></p><p><strong>En cuanto a calidad formativa</strong>, los grandes perjudicados de esta situación han sido los profesores. La mayoría de ellos están contratados <strong>por menos horas</strong> de las que realmente trabajan (gran parte de su salario<strong> es en B)</strong> por lo que, a la hora de verse afectados por<strong> ERTEs</strong>, solo han podido recibir prestación por la parte de su salario en A, llevando a la ruina a <strong>miles de profesores</strong>.</p><p>La falta de digitalización<strong> de la DGT</strong> pone también en evidencia la doble cara de la misma; por un lado, su digitalización respecto <strong>a penalizar la infracciones de tráfico</strong> es de las mejores de Europa; es un canal de recaudación de impuestos de los <strong>más sofisticado.</strong> Sin embargo, esa misma digitalización no se produce en la enseñanza<strong> vial,</strong> que queda en manos de un grupo de interés que campa a sus anchas y actúa de forma muy poco transparente, de lo que se deduce que <strong>se digitaliza para recaudar, no para formar.</strong></p><p>Como es realmente <strong>la CNAE</strong> quien organiza todo lo que tiene que ver con la educación vial, la<strong> DGT</strong> está cayendo en una trampa de <strong>“captura regulatoria»</strong>, en la cual la propia regulación está ahogando las fuerzas vivas del sector por preservar el estatus quo defendido por un sector tradicional cada vez<strong> menos representativo.</strong></p><p>A modo de ejemplo, <strong>sirva situación</strong> de discriminación de los alumnos <strong>que sufren los candidatos por libre,</strong> a los que apenas se les da fechas de exámenes ya que no suponen ningún tipo de ingreso para las autoescuelas, al limitarse a pagar únicamente<strong> las tasas de exámenes</strong> y no todas las tasas que imponen <strong>las autoescuelas</strong> para sufragar su mantenimiento.</p><p><strong>Autor: Miguel González-Gallarza. CEO de Onroad</strong></p><p>Foto: Archivo Telemadrid</p><p><div style=

 

 

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