El T.S. rechaza las objeciones de Van den Bosch Transporten en caso de los camioneros húngaros
Redacción.- El Tribunal Supremo de los Países Bajos ha rechazado todas las objeciones de la empresa de transportes Van den Bosch Transporten en el caso de los camioneros húngaros a los que no les pagaba el salario mínimo del país.
Van den Bosch Transporten de Erp ha vuelto a fracasar en todos los puntos del conocido como "caso húngaro" del Tribunal Supremo y ha sido condenado al pago de las costas. El Tribunal Supremo ha confirmado la posición de la FNV de que la Directiva sobre el desplazamiento de trabajadores se aplica al transporte internacional por carretera y transporta mercancías dentro de los Países Bajos como transportista extranjero.
Esa directiva garantiza, entre otras cosas, que los empleados extranjeros deben recibir el mismo salario que los empleados locales. Van den Bosch ha argumentado ante el Tribunal Europeo que el convenio colectivo de trabajo, que ella misma celebró, y la Directiva sobre el desplazamiento de trabajadores no se aplicarían.
Despidió a los conductores holandeses y contrató húngaros
Hace años, Van den Bosch Transporten despidió a muchos conductores holandeses y los cambió por conductores húngaros más baratos. La empresa opinaba que las reglas de publicación no se aplicaban a los conductores empleados por Van den Bosch Hungría. Cuando diez húngaros reclamaron salarios holandeses hace trece años porque hacían el mismo trabajo que sus antiguos colegas holandeses, fueron despedidos sin miramientos. La empresa ahora trabaja a menudo con conductores de países fuera de Europa, porque son incluso más baratos para la empresa.
La ley holandesa de trabajo es aplicable a los conductores húngaros de Van den Bosch Transporten
Pérdida de tiempo
El sindicato FNV está feliz con la decisión. Edwin Atema, líder de proyectos de Transporte Internacional en FNV: 'En lugar de tratar de manera justa a sus conductores y valorar la profesión de los conductores, la empresa simplemente estaba perdiendo el tiempo con procedimientos prolongados. Los conductores involucrados aún no han recibido los salarios a los que tienen derecho. Con trayectorias como esta, Van den Bosch demuestra que todavía hay manzanas podridas en un sector que está desesperado por empleados. Eso no solo es malo para los conductores, sino también para toda la imagen del sector del transporte”.
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