Adiós al albarán en papel: llega el control electrónico en el transporte de mercancías por carretera

Nuevo Reglamento de la UE sobre información electrónica en el transporte de mercancías
Un camionero con la documentación
Adiós al albarán en papel: llega el control electrónico en el transporte de mercancías por carretera

El proceso de digitalización que se viene aplicando en el sector del transporte de mercancías por carretera, continúa avanzando para lograr que se consiga una mayor eficacia en el mismo, y con ello un ahorro de costes, tanto para los clientes como para las propias empresas de transporte.

Y en ese sentido, si en un principio fue el paso del tacómetro de papel al digital, ahora se quiere poder implantar un nuevo sistema de albarán electrónico, conocido como carta de porte, que forma parte de las normas para el transporte internacional de las mercancías por carretera, denominado CMR (Convenio relative au contrat de transport International Marchandises par Route- recogido por el convenio de Naciones Unidas para el transporte de mercancías.

Este convenio, ratificado por la mayoría de los Estados europeos, indica que es aconsejable el uso del albarán CMR por parte de las empresas y conductores, dado que este nuevo albarán electrónico contiene la información sobre la mercancía enviada, la empresa que la transporta y quién es el que la recibe. Hasta ahora esa hoja de ruta era de papel, pero con el nuevo impulso de la tecnología, desde los organismos oficiales se quiere avanzar hacia el formato electrónico, pasando del CMR al e-CMR. Una nueva forma de control de la cadena de transporte que es mucho más eficaz y que además permite que tanto las empresas como los clientes puedan ahorrarse costes.

En vigor desde enero

Esta nueva aplicación ha entrado en vigor en enero del pasado año, y fue adoptada inicialmente por España, Bulgaria, República Checa, Dinamarca, Estonia, Francia, Letonia, Lituania, Holanda, Eslovaquia y Suiza. A lo largo de 2017, se han sumado también Austria, Bélgica, Alemania, Italia, Luxemburgo, Noruega y Suecia.

La carta de porte no es otra cosa que un documento oficial entre quien envía la mercancía y quien la transporta, y es una prueba documental esencial de la carga que transporta el vehículo. Con el e-CMR, los operadores podrán introducir datos de manera electrónica, almacenar información relativa a la logística y llevar a cabo un intercambio de datos en tiempo real por medio de un teléfono móvil o tableta. El paso hacia este nuevo sistema de albarán va a suponer una reducción del impacto ambiental con la reducción del gasto de papel, un aumento de eficacia y poder minimizar aquellos requisitos que se deben llevar a cabo para el archivado de los mismos.

También limita la posibilidad del error humano, y se puede utilizar en las plataformas de cada idioma, dando su protagonismo como protocolo a los movimientos de mercancías a nivel internacional.

Implantación del 'e-CMR'

Aunque aún es un proceso lento y embrionario, hay que destacar que en España se ha desarrollado el pasado año una de las primeras pruebas de uso del e-CMR en un trayecto de carga, transporte y descarga. Esta se ha desarrollado en un viaje desde Huelva a la localidad francesa de Perpiñán, y fue llevada a cabo por la empresa española Primafrio. Esta experiencia ha permitido comprobar la bondad del cambio de sistema, el abandono de los papeles y el paso de ese tipo de albarán clásico al que permite ahora la moderna tecnología.

Recientemente se ha organizado una jornada sobre la aplicación de este nuevo albarán electrónico en la Fundación Corell, con la intervención de los principales expertos en el transporte de mercancías por carretera, donde ha quedado claro que la aplicación del e-CMR es "necesaria y beneficiosa".

Una de las conclusiones de este análisis sobre el cambio es que se trata de una de las mejores formas de documentar los contratos de transporte, por los numerosos beneficios en costes, por la productividad y seguridad jurídica que conlleva.

En España los transportistas están obligados a llevar un documento de control que está regulado por una orden ministerial del año 2012, que debe estar a disposición de la Inspección de Transporte, y que si no se conserva se considera una infracción grave. Este documento es el que establece las condiciones en las que se realiza el transporte. Su contenido es similar a la carta porte. Por ello, a juicio del subdirector general de Ordenación y de la Normativa del Transporte Terrestre de Fomento, Emilio Sidera, participante en la jornada de la Fundación Corell, "no tiene sentido hacer dos documentos idénticos, cuando con uno sólo se podrían cumplir todos los requisitos".

Para Sidera, es cada vez más recomendable utilizar un documento como es el e-CMR con el que se puede acreditar la legalidad de los que hace el transportista en el ámbito administrativo, y que además se trata de uno de los modelos estandarizados dentro de la Organización Internacional de los Transportes por Carretera (IRU).

Y si bien este e-CMR es fundamental para el transporte internacional, no se debe dejar de lado en el trasnsporte nacional, en el interno, dado que es mucho mejor tener un único modelo de control y documentación, por lo que desde Fomento se quiere potenciar "un cambio en la línea de conducta".

Aplicación de nuevas tecnologías

En este interés por la apllicación de las nuevas tecnologías al transporte por carretera se ha sumado la introducción de un apartado referente a ello en el Plan Digital 2025 que defiende la CEOE.

El Plan tiene una referencia específica para el transporte de mercancías y logística donde aborda cómo se puede responder a las nuevas demandas digitales y ganar competitividad. Este plan podría acelerar la transformación hacia un sistema de transporte de mercancías más eficiente, mediante el desarrollo de estándares, agilización del intercambio de información, y la unificación de los formatos de documentos del transporte, armonizando los diferentes países, con la implantación del e-CMR.

Desde la principal asociación de transporte internacional por carretera de España, Astic, se defiende la implantación del e-CMR por lo "beneficioso que es para el sector," y se considera una oportunidad para aprovechar todo lo que ofrece la digitalización. Si bien, tal y como reconoce el director general de la asociación, Ramón Valdivia, "nos cuesta trabajo hacer estos cambios, pero debemos romper la inercia y disfrutar de todas las ventajas económicas y jurídicas que ofrece, así como de la visibilidad". Y a su juicio es una de las oportunidades que tiene España para mejorar en competiitividad y ser uno de los países pioneros en la implantación del nuevo albarán electrónico.

Aunque la entrada oficial tuvo lugar a principios del año pasado, aún no se puede hablar de un uso determinado por parte de las empresas de transporte por carreteras españolas, ni a nivel internacional, ni a nivel nacional. Ocurre como pasó hace unos años con el cambio de los tacógrafos, y que si bien es cierto que los modelos, antiguo y digital nuevo, compartieron protagonismo un cierto tiempo, al final la tecnología fue la vencedora. El albarán de papel seguirá existiendo, pero el e-CMR ganará fuerza en los próximos años. Fuente: eleconomista.es