Tranquilidad con reservas para los camioneros en Calais
El director de la empresa de transporte RDV, Jean-Pierre Devigne, continúa siendo cauto en sus declaraciones. "La Jungla" ha sido desmantelada y cerca de 10.000 inmigrantes han abandonado Calais, desapareciendo con ellos los asaltos diarios a los camiones que circulaban por la carretera de circunvalación del puerto y la A-16, pero el transportista no es optimista y piensa que no se debe celebrar una victoria temprana y que hay que continuar en alerta.
A día de hoy se muestra más tranquilo, ya que no ha tenido ningún incidente desde la noche del 15 al 16 de octubre en la que un trabajador de su empresa, de origen rumano, tuvo un serio percance que le podría haber costado la vida. Manifiesta su preocupación por la poca vigilancia policial que hay, a excepción de las entradas a Calais, ya que han centrado su atención en otros puntos estratégicos desde el final del mantelamiento del campamento.
David Sagnard, presidente de la FNTR (Federación Nacional de Transporte por Carretera, Ed) del Pas-de-Calais, considera insuficiente el presupuesto de dos millones de euros que se destinaron para las empresas de transporte de mercancías, cuyo volumen de negocio supere el millón de euros. Para la solicitud de la indemnización las empresas deberán declarar un pérdida del 30% de sus ingresos, no por la falta de ingresos si no porque han sido víctimas de saqueos y destrozos materiales, lo que conlleva pérdidas financieras del sector.
Las instrucciones para los conductores siguen siendo las mismas, se les pide no aparcar a menos de 150 kilómetros de Calais, permanecer expectantes especialmente después de una semana de tranquilidad. No es probable que se produzcan nuevos bloqueos pero no se descarta algún incidente aislado. Se ven pocos inmigrantes por la zona de Marcel-Doret, pero posiblemente porque se esconden en otros emplazamientos puesto que continúan llegando a diario.
Los conductores de camiones y transportistas continuarán pendientes de lo que ocurre a su alrededor antes de volver a conducir con normalidad. Han sido seis meses de bloqueos intensivos por lo que esperan que la calma dure mucho tiempo.
