AUGC reclama un plan real para la recuperación de la plantilla de Tráfico y no un mero parche

Este aumento resulta, además, claramente insuficiente
Un guardia civil de trafico
AUGC reclama un plan real para la recuperación de la plantilla de Tráfico y no un mero parche

Tras conocerse ayer el aumento en un 15% de las víctimas de accidentes de tráfico en las carreteras españolas durante este verano, la Dirección General de Tráfico ha anunciado que 265 guardias civiles se incorporarán en el mes de septiembre a la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil para vigilar las vías e incrementar los controles de alcoholemia y drogas. También ha propuesto como medidas para rebajar la siniestralidad otros dos factores: la reducción del límite de velocidad en sus vías convencionales a 80 kilómetros por hora y la implantación de más radares.

En primer lugar, desde AUGC dicen al Director General Pere Navarro que sus cifras no son reales, ya que no serán 265 los nuevos agentes de Tráfico, sino un número mucho menor, el resultante de restarle los 88 que causan baja en la Agrupación por jubilaciones u otras circunstancias. De esta manera, el número real de guardias civiles que reforzarán esta especialidad será de tan solo 177.

Este aumento resulta, además, claramente insuficiente, dado que desde el año 2011 se había ido produciendo un paulatino recorte en los efectivos de esta Agrupación, de manera que de los 9.800 guardias civiles que en 2010 llegaron a patrullar las vías españolas se ha pasado tras los recortes de personal a tan solo 8.800.

La ecuación parece sencilla de resolver: menor número de agentes de Tráfico igual a menor labor preventiva y por lo tanto al aumento de la siniestralidad y de pérdida de vidas.

Este descenso ha repercutido, además, especialmente en el número de auxilios en carretera llevados a cabo por los agentes, que ha bajado drásticamente de los más de 120.000 de 2010 a los menos de 20.000 del pasado año.

Por lo tanto, desde AUGC reclaman un plan real para la recuperación de la plantilla de Tráfico, y no un mero parche que no supone ni un 10% de la necesidad real, puesto que haría falta un refuerzo de no menos de 1.500 nuevos agentes.

Ese es el principal remedio al alarmante incremento de víctimas en las carreteras españolas que se viene produciendo en los últimos años, lejos de otras soluciones como la del aumento de radares o limitaciones de velocidad. (Foto de archivo)