Para los casi 3 millones de desempleados, la Confederación Alemana de Sindicatos (DGB) insta al gobierno federal a no recortar las agencias de empleo y los centros de empleo hasta el punto de la ruina.
La DGB también recuerda a los empleadores su responsabilidad. Anja Piel, miembro de la junta directiva de la DGB, declaró el jueves en Berlín: «Casi tres millones de desempleados son demasiados. No se trata de un aumento veraniego normal. La crisis está teniendo un impacto drástico en el mercado laboral. Para evitar que aún más personas pierdan su empleo, el gobierno federal debe poner fin a los debates inútiles y emprender la lucha contra el creciente desempleo».
Sobre todo, el gobierno federal debe garantizar la capacidad de las agencias y los centros de empleo para actuar y poner fin a todos los debates que perjudican a los empleados.
Especialmente cuando los empleos están en riesgo, no es necesario un otoño lleno de propuestas injustas para recortar las prestaciones sociales, sino uno en el que la gente pueda confiar en recibirlas. El desempleo no disminuirá recortando las prestaciones por desempleo ni denigrando la labor de las agencias de empleo y los centros de empleo, señala la confederación.
«Lo que se necesita, en cambio, es más trabajo decente y mejores perspectivas para las personas; las empresas y los empleadores tienen una responsabilidad en este aspecto», afirma Anja Piel.
Para DGB despedir a los empleados clave ahora sería un error fundamental; de lo contrario, el problema de la escasez de mano de obra cualificada volverá a afectar a estas mismas empresas después de la crisis.
Pero el gobierno federal también necesita ponerse manos a la obra, ofreciendo conceptos sólidos y plenamente financiados para la política del mercado laboral y las iniciativas de formación continua.
«Lo que requiere unidad y una voluntad compartida para asumir la responsabilidad por la ciudadanía», resaltan desde la Confederación Sindical alemana.
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