A primera hora de la tarde de ayer lunes 25 de agosto, se produjo un gran incendio en una zona logística conectada al puerto alemán de Hamburgo, provocado por una cadena de explosiones. El origen del incendio comenzó en torno a las 15:31 h por un vehículo industrial en un almacén del distrito de Veddel, al sureste de la ciudad, donde tienen su sede varias empresas de transporte y logística.
El lunes por la tarde, el centro de control de emergencias del Departamento de Bomberos de Hamburgo recibió la notificación de un vehículo en llamas en un almacén de la Müggenburger Straße en Hamburg-Veddel. Cuando los primeros servicios de emergencia llegaron al lugar, varias bombonas de gas a presión ya habían explotado en el almacén. Las explosiones y la intensidad del incendio fueron tan graves que el responsable del incidente, tras una evacuación inicial y el rescate de las personas, decidió retirarse inmediatamente. En ese momento, la extinción directa del incendio ya no fue posible debido al alto riesgo para los bomberos.
Las explosiones de los cilindros de gas comprimido propulsaron escombros incandescentes a cientos de metros de altura, provocando numerosos incendios. Se incendiaron polígonos industriales, así como edificios y espacios abiertos colindantes. La cercana autopista A1 también tuvo que permanecer completamente cerrada durante varias horas debido a la caída de escombros. Los escombros impactaron contra vehículos en tránsito, hiriendo a una persona. El cuerpo de bomberos estableció una zona de exclusión de 400 metros y envió varias unidades de servicios de emergencia a la autopista A1 para atender a los heridos.
Las investigaciones iniciales revelaron que los cilindros de gas presurizado eran de óxido nitroso. Sin embargo, no se pudo descartar la presencia de otros gases desconocidos. Para garantizar la seguridad de la población circundante, el departamento de bomberos envió varios vehículos de medición para inspeccionar el área circundante al lugar. Estos proporcionaron mediciones continuamente al centro de comando in situ. Debido a la densa humareda que se extendía hacia el sureste de la ciudad, también se emitió una alerta pública a través de aplicaciones de alerta y redes sociales. Se pidió a los residentes de la zona que mantuvieran las ventanas y puertas cerradas y apagaran los sistemas de aire acondicionado y ventilación.
Dado que el personal de emergencia no pudo acercarse al lugar del incendio, se realizó un reconocimiento aéreo con drones y el helicóptero Libelle de la policía. Esto permitió al comando del incidente obtener una visión general de la situación e implementar medidas adicionales de control de daños.
Las exhaustivas medidas de evacuación en la zona de peligro permitieron rescatar a 25 personas. Ocho de ellas quedaron atrapadas en un aparcamiento y solo pudieron ser rescatadas en barco. Todos fueron examinados posteriormente por el servicio de rescate de Hamburgo, que los declaró ilesos. Un total de tres personas resultaron heridas: una con lesiones que pusieron en peligro su vida y otra con lesiones graves. Fueron trasladadas por el servicio de rescate a hospitales cercanos. Las personas afectadas y ilesas fueron atendidas por el Equipo de Intervención en Crisis (KIT) de la Cruz Roja Alemana.
Inicialmente, el cuerpo de bomberos combatió los incendios que rodeaban el gran incendio.
La extinción directa en el centro del incendio seguía siendo imposible debido a las explosiones, que se prolongaron durante dos horas y media. Con camiones de bomberos del aeródromo del Departamento de Bomberos del Aeropuerto de Hamburgo, cañones de agua móviles del cercano departamento de bomberos de la planta de Aurubis y cañones de agua de la Policía de Hamburgo, las labores de extinción se ampliaron gradualmente, a pesar del peligro constante de explosión, y se extinguieron los incendios internos. La alta demanda de agua para la extinción supuso un reto adicional para los servicios de emergencia. Se bombearon grandes cantidades de agua al lugar mediante largas mangueras y el barco de bomberos Prag.
Se había convocado un equipo de mando de los departamentos de policía y bomberos para coordinar los servicios de emergencia. La Agencia Federal de Ayuda Técnica (THW) también apoyó la monitorización de las redes sociales con un Equipo de Apoyo a las Operaciones Virtuales (VOST).
La Agencia Federal de Ayuda Técnica también desplegó personal de emergencia para garantizar la iluminación en el lugar. Está prevista la demolición parcial del edificio afectado con cargadoras de ruedas y excavadoras de la THW durante la madrugada para facilitar las medidas de extinción de incendios específicas.
El techo del almacén se había derrumbado antes de la medianoche debido al incendio a gran escala del edificio. Cilindros de gas a presión explotaron repetidamente en el depósito de contenedores adyacente. Los escombros arrojados por las explosiones dañaron varios vehículos de bomberos. Partes de un vehículo con escalera giratoria perforaron el techo. Ningún bombero resultó herido. El Servicio de Bomberos y los Servicios de Emergencia de Hamburgo estaban desplegados en Hamburgo en ese momento con más de 320 efectivos de emergencia.
Las operaciones de extinción de incendios continuaron durante más de quince horas, con las dotaciones de bomberos trabajando sin descanso hasta la mañana de hoy 26 de agosto. Durante la madrugada se llevó a cabo una demolición parcial y controlada del edificio dañado con excavadoras y palas cargadoras para que los bomberos pudieran llegar a los últimos focos de incendio. Una vez extinguido el siniestro, tanto los bomberos como las autoridades competentes alemanas, están llevando a cabo investigaciones para determinar la causa del incendio y a los responsables.
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