Schmitz Cargobull, el fabricante europeo de semirremolques, y el alcalde de Vreden, Dr. Tom Tenostendarp, están encantados de que se haya concedido el permiso de planificación para una ampliación del área de entrega de Schmitz Cargobull para semirremolques refrigerados y de caja en las instalaciones de la empresa en Vreden (Alemania).
Las obras, que se prevé que comiencen en el primer semestre de 2025, durarán aproximadamente un año. Con esta importante inversión se creará una superficie adicional de unas 11 hectáreas con 750 nuevas plazas de aparcamiento para vehículos.
De este modo, se agilizará el proceso de entrega de vehículos, lo que también protegerá el medio ambiente al reducir la cantidad de transporte necesario.
Con la ampliación, el número de plazas de aparcamiento externas alquiladas en las inmediaciones de la planta de Schmitz Cargobull para el almacenamiento de vehículos hasta su recogida se reducirá de más de 20 a 10.
Las diez plazas de aparcamiento restantes se encuentran en las inmediaciones de la planta de Schmitz Cargobull, estando la más alejada a tan solo seis kilómetros.
«La amplia zona de aparcamiento de la planta también es importante desde el punto de vista de la sostenibilidad. Actualmente, tenemos que aparcar algunos vehículos a varios kilómetros de la planta hasta que estén listos para ser recogidos por el cliente, ya que no hay suficiente espacio de aparcamiento en el centro de entrega. Gracias a las 750 plazas de aparcamiento adicionales, el número de kilómetros de transporte necesarios se puede reducir en unos 200.000 kilómetros al año, lo que supone un ahorro de alrededor del 80 por ciento. Esto reducirá considerablemente la carga del tráfico local y también reducirá las emisiones de CO2 de nuestro transporte interno en aproximadamente un 80 por ciento, lo que supondrá un ahorro de aproximadamente 150 toneladas de CO2 al año», añade el director de la planta, Christian Glebe.
El aumento del uso de vehículos eléctricos también contribuirá a una mayor sostenibilidad. Esta tecnología respetuosa con el medio ambiente no solo reducirá las emisiones para un entorno más limpio, sino que también reducirá la contaminación acústica en la zona.
Con esta inversión en la planta de Vreden, Schmitz Cargobull refuerza su posición como líder innovador y responsable del mercado de vehículos comerciales y demuestra cómo el éxito económico y la responsabilidad medioambiental pueden ir de la mano.
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