EUROPA PRESS.– El sector del transporte concentró el 68% del consumo de productos petrolíferos en el año 2018, con un aumento del 2,7% respecto al ejercicio anterior, según datos de Cores sobre la distribución de los consumos de productos petrolíferos por sectores económicos.
Dentro de este sector, que agrupa los consumos de los combustibles utilizados por carretera, ferrocarril, aviación nacional e internacional y navegación doméstica, independientemente del sector en el que se desarrolle la actividad, solo el transporte por carretera representó el 53% del total.
Detrás, aunque muy lejos en consumo, figura la aviación internacional, con el 9%, que volvió a aumentar este año un 4,2% frente a 2017. A continuación, perteneciente al sector industrial, se situó la química y petroleoquímica, con el 6%.
Por su parte, la producción de electricidad (sector transformación) continuó descendiendo respecto a 2017 (-11,4%) y se sitúa en quinto lugar, superado en 2018 por el subsector residencial (otros sectores) que aumentó un 4,4%.
El consumo de uso energético, donde los productos se emplean como combustible o se destinan a su transformación en otras formas de energía, ya sea electricidad y/o calor, representa el 91% del total y está presente en todos los sectores. Mientras, el consumo de uso no energético, que se corresponde con el de los productos petrolíferos utilizados como materia prima, supone el 9% restante y se localiza únicamente en tres sectores (transporte, industrial y ‘otros sectores’).
En el sector transporte, el gasóleo es el producto de mayor consumo dentro del sector, con un 65% del total, le sigue el queroseno (19%) y las gasolinas (14%), lo cual supone una distribución de consumo de productos petrolíferos similar a la del año previo.
Foto: Archivo
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