Si estás pensando en renovar tu vehículo este año, y trabajas por cuenta propia o gestionas una empresa, 2025 viene con varias opciones interesantes, aunque también con algunas limitaciones. El foco está claro: el Gobierno quiere impulsar la movilidad eléctrica, y la mayoría de las ayudas están pensadas para quienes apuesten por modelos más limpios.
El plan MOVES III sigue siendo la vía principal
El Plan MOVES III, en marcha desde 2021, se ha prorrogado hasta el 31 de diciembre de 2025. Es la herramienta más potente ahora mismo si quieres cambiar de coche por uno eléctrico o híbrido enchufable. Está abierto a autónomos, pymes y empresas, y cubre desde turismos hasta furgonetas.
Las cifras varían según el tipo de vehículo y si entregas uno antiguo:
-
Hasta 9.000 € por una furgoneta eléctrica con achatarramiento.
-
Hasta 7.000 € por un turismo eléctrico en las mismas condiciones.
También hay ayudas para híbridos enchufables, pero algo más bajas.
Hay algunos límites que hay que tener en cuenta: por ejemplo, el coche no puede superar los 45.000 € sin IVA (53.000 € si tiene 8 plazas). Y, como pasa con casi todo, los trámites hay que hacerlos después de la compra, directamente con la comunidad autónoma donde estés.
Si quieres hacerte una idea rápida de qué modelos pueden encajar con estos requisitos, te puede venir bien echar un vistazo a las opciones de coche nuevo en https://www.bymycar.es/es, donde además puedes ver precios y disponibilidad real en concesionarios oficiales.
¿Y la parte fiscal? También hay algo que rascar
Desde mediados de 2023, también puedes aplicar una deducción del 15 % en la renta por la compra de un coche eléctrico o por instalar un punto de recarga. Es algo a tener en cuenta si tributas por estimación directa, y sobre todo si estás haciendo una inversión más grande.
En algunas comunidades, como Galicia, han ido un paso más allá. Allí se ha activado el plan Renova Tu Vehículo, que ofrece entre 3.400 y 4.600 € para autónomos con familias numerosas o necesidades específicas. Eso sí, hay que entregar un coche viejo y el nuevo no puede costar más de 42.000 € (salvo excepciones).
También hay ayudas para instalar cargadores
Si además de cambiar de coche, quieres tener tu propio punto de carga (en casa o en el negocio), el MOVES III cubre hasta el 70 % del coste de instalación, y hasta el 80 % si estás en un municipio de menos de 5.000 habitantes.
Y si usas tu coche para trabajar —por ejemplo, como taxi o VTC— puedes sumar un 10 % extra sobre la ayuda base. Algunas ciudades también ofrecen descuentos en el IVTM (el impuesto de circulación) para coches eléctricos o híbridos enchufables.
¿Y si quiero seguir con motor de combustión?
Aquí vienen las malas noticias: ya no hay ayudas estatales para vehículos diésel o gasolina. El antiguo Plan Renove ha desaparecido del mapa. Solo algunas regiones, como Galicia, han sacado líneas puntuales de apoyo a coches de bajas emisiones, pero son casos muy concretos.
Esto quiere decir que, si te estás planteando cambiar de coche en 2025, lo más rentable —al menos en lo que se refiere a ayudas— será optar por un eléctrico o híbrido enchufable.
Una buena planificación puede marcar la diferencia
Sabemos que no todo el mundo puede hacer la transición a un eléctrico de un día para otro. Pero si estás valorando el cambio, 2025 puede ser un buen momento, especialmente si aprovechas las ayudas y revisas bien qué modelos cumplen los requisitos.
Al final, todo se reduce a hacer números y ver qué encaja mejor con tu situación. Porque cambiar de coche no es solo una inversión en movilidad: también puede ser una forma de ahorrar a medio plazo.
Se eliminarán los comentarios que contengan insultos o palabras malsonantes.