El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible expedirá tarjetas de tacógrafo a conductores con permiso de turismo que conduzcan vehículos de bajas emisiones, resolviendo un vacío legal de cinco años.
España pondrá fin a una contradicción normativa que impedía a los conductores con permiso de clase B (turismo) obtener la tarjeta de tacógrafo necesaria para conducir camiones ligeros de combustibles alternativos, a pesar de estar autorizados para hacerlo desde 2020. El Ministerio de Transportes prepara un decreto que armonizará ambas normativas.
La discordancia legal surgió cuando el Reglamento General de Conductores permitió, hace cinco años, conducir estos vehículos de hasta 4.250 kilos -con sistemas de propulsión alternativos como eléctricos o de gas- a titulares del carné B con más de dos años de antigüedad. Sin embargo, la norma de 2005 sobre el tacógrafo digital no contemplaba la expedición de tarjetas a este colectivo, creando un vacío legal.
La regularización afectará a conductores que ya podían conducir estos camiones ecológicos pero no podían cumplir con la obligación del tacógrafo, esencial para el control de tiempos de conducción y descansos.
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