Redacción.-En Pinos Puente, a 20 minutos de Granada, existe si no un cementerio, sí un panteón especial. Es el de Antonio F. C., al que su familia ha querido recordar con una escultura a tamaño real y en bronce a color. Así lo recoge en una noticia el diario El País en su sección Diario de España.
Antonio está representado en su cotidianidad y se ve que debió ser de gustos nada baratos, a juzgar por los detalles que adornan su escultura: un buen Rolex de oro, anillo de diamantes, zapatillas Moncler un bolso Gucci. No se ha olvidado la familia de su paquete de Marlboro y su mechero. El toque de calidez lo aporta la gorra, de tela, de Tommy Hilfiger.
Antonio F. C. también era conocido como Antonio el tonto. Y no porque lo fuera, sino porque ese es el mote de la familia. La Guardia Civil puede dar fe de que el apelativo era solo eso, un mote. A los agentes los traía de cabeza. Antonio el tonto era también conocido, a juzgar por los antecedentes penales con razón, como el Pirata de los camiones. Fue detenido en múltiples ocasiones por toda España y en el sur de Francia por desvalijar camiones parados en áreas de servicio. Cuentan las crónicas periodísticas que su golpe más sonado fue contra un camión de El Corte Inglés que trasportaba perfumes valorados en un millón y medio de euros.




Se eliminarán los comentarios que contengan insultos o palabras malsonantes.