A sus 19 años, Charlene Kerkhof demuestra que los jóvenes profesionales están preparados para impulsar el futuro del transporte por carretera.
Criada en una familia de camioneros en los Países Bajos, ha convertido su pasión en una carrera. Ahora domina la carretera y pide mejores oportunidades para ayudar a que más conductores jóvenes tengan éxito.
Charlene Kerkhof empieza sus mañanas temprano, subiendo con confianza a la cabina de su camión como una profesional experimentada. Empezó a conducir a los 18 años y ahora, a los 19, ya ha demostrado su valía en el exigente mundo del transporte por carretera. Mientras que muchos de su edad todavía están explorando caminos profesionales, Charlene ya está en la carretera, asegurándose de que las mercancías se entreguen de forma segura y a tiempo.
Siempre ha estado rodeada de camiones. Su hermano transporta contenedores y su abuelo era conductor y mecánico. Desde muy pequeña supo que quería seguir sus pasos.
Ahora combina el aprendizaje en el aula con la experiencia práctica. Es un equilibrio difícil, pero que acepta plenamente.
“El verdadero conocimiento surge cuando estamos en el camino. En la escuela se aprende mucho, pero nada te prepara mejor que conducir«, afirma.
El camino hacia la confianza
Entrar en la industria a una edad temprana conlleva desafíos. Al principio, a algunas personas les sorprende ver a una mujer joven al volante.
“No se lo esperan», admite. “Pero cuando ven lo bien que manejo mi camión, me respetan».
Sin embargo, su mayor preocupación no es el género, sino la falta de conductores jóvenes.
Conducir con seguridad y pensar en el futuro
Para Charlene, la seguridad es la base de su profesión. Se toma muy en serio todos los aspectos, desde la planificación de la ruta hasta la anticipación del comportamiento de otros conductores.
La formación y el asesoramiento que ha recibido de conductores experimentados la han ayudado a ganar confianza.
“Comencé a conducir y a observar cómo los profesionales manejaban distintas situaciones. Eso me dio la experiencia que necesitaba para ponerme al volante«, dice Charlene.
Una visión para el futuro
La determinación de Charlene por triunfar es evidente en la forma en que aborda cada aspecto de su trabajo. Ya sea el mantenimiento de su camión, el perfeccionamiento de sus habilidades de conducción o la planificación de rutas eficientes, se enorgullece de ser una profesional.
Para ella, cada viaje es una experiencia de aprendizaje. Considera que cada día es una oportunidad para mejorar aún más sus habilidades y adquirir nuevos conocimientos sobre el sector. Disfruta de la independencia que conlleva el trabajo, pero también valora la camaradería entre los conductores.
Cerrar la brecha: habilidades y capacitación
De cara al futuro, Charlene está ansiosa por ampliar su experiencia. Sabe que, en una industria en constante evolución, la versatilidad es clave.
“Mi próximo objetivo es operar un camión grúa para poder encargarme de la carga y descarga», afirma. “Ser polivalente te hace más valiosa».
También espera que haya más jóvenes que se planteen seguir una carrera en el sector del transporte. Si bien la profesión ofrece libertad y estabilidad, cree que es esencial aumentar la concienciación y mejorar el acceso a la formación.
“Hay mucho potencial para los conductores jóvenes, pero necesitan saber que existen oportunidades», afirma. “Mejores programas de formación y trayectorias profesionales claras ayudarían a más gente a empezar».
Un llamado a la acción
Mientras la industria enfrenta una creciente escasez de conductores, Charlene cree que los responsables políticos deben intensificar sus esfuerzos para garantizar que la próxima generación de conductores pueda acceder a la capacitación y el apoyo que necesitan.
“Necesitamos más programas de aprendizaje, financiación para la formación y vías claras de progresión profesional«, afirma. “Hay escasez de conductores y los jóvenes como yo estamos dispuestos a dar el paso».
Inspirando a la próxima generación
Charlene espera que más jóvenes consideren una carrera en el transporte de camiones y cree que con el estímulo adecuado, más jóvenes asumirán el asiento del conductor.
“El transporte es lo que hace que todo siga en movimiento», afirma. “Es una gran responsabilidad, pero también es una carrera increíble».
A medida que sigue sumando kilómetros, Charlene demuestra que la próxima generación de profesionales del transporte por carretera ya está aquí. Con las políticas, la formación y las oportunidades profesionales adecuadas, los conductores jóvenes, cualificados y motivados como ella seguirán transportando mercancías durante muchos años.
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