Los transportistas y transitarios han vuelto a sufrir importantes interrupciones en los últimos días debido a huelgas y bloqueos en el puerto de Róterdam. Las acciones de los amarradores, responsables de asegurar y descargar los contenedores, han paralizado en gran medida el tráfico de contenedores.
Al mismo tiempo, activistas de Geef Tegengas (Give Counter-Gas) bloquearon hoy varias vías de acceso a las terminales de contenedores, impidiendo a los camioneros cargar y descargar durante un periodo prolongado.
La combinación de huelgas y bloqueos ha perturbado gravemente el proceso logístico del puerto. Los conductores quedaron varados durante horas, hubo que cancelar viajes y las entregas no llegaron a tiempo a los clientes. El perjuicio para las empresas de transporte es considerable, y las huelgas tienen un impacto directo en los ingresos de los conductores y la continuidad de las cadenas de suministro.
Dado que los manifestantes han anunciado planes para reanudar sus protestas mañana, TLN insta al alcalde de Róterdam a intervenir de inmediato en caso de nuevos bloqueos. La seguridad de los conductores y los manifestantes debe ser siempre primordial. Además, el puerto es un eslabón vital de la economía neerlandesa y no puede simplemente cerrarse.
TLN también apoya la iniciativa de una amplia coalición de organizaciones del sector portuario para buscar el fin de la huelga de amarres en curso a través de los tribunales. Esta huelga, que se mantiene desde la tarde del miércoles, está provocando una importante paralización del tráfico de contenedores y ralentizando aún más la cadena logística.
Manifestarse y hacer huelga son derechos fundamentales, pero las protestas actuales están paralizando a todo un sector. Los negocios pierden ingresos, los conductores no pueden trabajar y el suministro a tiendas y negocios se ve comprometido. El daño social es desproporcionado a los objetivos de las protestas.
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