Opinión

Cuesta abajo y sin frenos. "Camionero García". Opinión

Cuesta abajo y sin frenos. "Camionero García". Opinión
Imagen de Cuesta abajo y sin frenos
Cuesta abajo y sin frenos. "Camionero García". Opinión

Es el sector del transporte por carretera un sector complejo lleno de actividades diferentes y que marcan sus directrices en el procedimiento a la hora de trabajar. Es también muy diferente la situación en la que se encuentran cada uno de los actores que intentan sobrevivir a una selva de normativas, una selva de intereses y una selva de agregados que ven en el mundo de la logística y la cadena de transporte una buena forma de ganarse la vida sin subirse a un camión.

Algunos creyeron que con poca inversión y con la capacitación profesional, o sin ella y capacitados por un tercero y sin un duro, podían salir a buscarse la vida en este mercado, pero parece ser que se olvidaron que el pez grande se come al pequeño y no les quedó más remedio que tragar con las migajas que otros dejaban. Esto ha sido así durante muchos años hasta hoy, porque la vieja escuela ya no está en activo y aquellas formas de hacer no son las de hoy ni son las que volveremos a ver.

Como digo muchos llegaron pensando que aquí lo de la formación no era un problema para subsistir y que además había dinero fácil para crecer y así invirtieron comprando más camiones, poniendo asalariados al volante y no cumpliendo la más mínima norma elemental. Mientras los grandes eran cada vez más grandes, muchos se convirtieron en operadores sin camiones y tal crecimiento necesitaba de normas más complejas y restrictivas y Europa se puso a ello junto con los gobiernos de cada país.

Pues a pesar de ir a peor, no cubrir las expectativas y a base de precarizar el trabajo de conductor, muchos pequeños crecieron o se dedicaron a aguantar lo que se les echara encima, sin rechistar y donde uno se iba por agotamiento, había dos o tres esperando, sin darse cuenta que con los únicos que competían era con los conductores asalariados, por ser ellos, los autónomos, una mano de obra más barata y con menos riesgo para su negocio, el de los grandes, siendo cómplices activos de una situación que se les echaba encima.

Ya sabemos que quien pone el trabajo es el que manda y como manda y mucho, visto cómo se comporta con ellos las administraciones, pues todos los pequeños en silencio y comiendo de las migajas del sector, o mejor dicho aceptando que el precio de sus servicios se los pusiera otro, cosa válida porque quien no sabe hacer su contabilidad da por buena la que otro le haga. Y en esas estamos mientras se esparce mierda hacía todas las direcciones, haciéndose víctimas los que pensaban que eran héroes.

Y sí, cuando hay necesidad uno se agarra a un clavo ardiendo, pero con el ánimo de sacar sus asuntos adelante, no dejando cadáveres en el camino, que es lo que parece que se quiere hacer. Y digo esto porque si a uno le va mal, le tiene que ir mal a todos, cuando esto pasa por la poca cultura empresarial que se tiene y la deficiente formación que se vislumbra en el sector.

Ya digo, cuando uno es incapaz de hacer de su negocio rentable, ya sea por incapacidad propia, que la hay y mucha, o por presiones de los cargadores, lo que menos se tiene que hacer es llorar a las administraciones, porque de todos es sabido que los pequeños empresarios, son gente muy suya, dividida y poco dada a abrir cuentas para conocer la verdadera realidad de las cosas y como digo, las administraciones nada les van a dar.

No se lien, es verdad, el empresariado del sector en España lleva diciendo que esta actividad es una ruina años y al parecer se lleva trabajando a pérdidas años, que no digo que no, pero que las cuentas no salen, ruina antes y perdidas ahora, entonces ¿Cómo han subsistido? no los que tienen un camión que pueden tener mayor capacidad de sacrificio, sino los que tienen varios o muchos, porque en esa tesitura sólo continuarían aquellos con capacidad de endeudarse y no todos pueden.

Al tema, nos van a llevar a un nuevo paro aquellos que en su incapacidad piden que otro, el gobierno, les solucione lo que ellos no quieren solucionar, sí hombre sí, porque es uno mismo el que debe decir no en vez de andar de agencia en agencia o en buscadores de cargas, buscando a quien quitarle el trabajo bajando precios, mientras se esconden detrás de unas reivindicaciones que no van a cumplir.

Pero están en su derecho de parar, pero que no engañen a nadie, porque en este momento y con la normativa en la mano, el gobierno poco o nada puede hacer, más allá de implementar más normas, como si tuviéramos pocas e inspeccionar más, algo que va a costar tiempo y paciencia, porque por mucho paro que haya, esto no se lo van a dar de la noche a la mañana.

Y digo no engañen, sí hombre sí, no son mayoría, no tienen nada para los asalariados que este negro sobre blanco y ademas llaman al resto de la sociedad a participar, ¿participar de qué? de su incapacidad. También llaman a que se asista a las reuniones para decidir el paro a simpatizantes o ciudadanos. Pero yo me pregunto, las votaciones deberán ser entre sus socios, porque si no cualquiera que pase por allí levanta la mano afirmativamente y ese voto ya es válido, y no, eso no es serio ni formal, eso es un llamamiento al fraude y a la mentira. Cualquier voto no vale, valen los de su asociación siempre que esté afiliado y al corriente de pago, a no ser que sus estatutos digan que el proceso democratico de elección se lo pasan por el forro.

Bueno pues nada solo desear suerte en este envite y que no tengamos que volver a lo mismo después de un tiempo porque siguen sin ser capaces de ponerse frente al que les oprime, no todos porque muchos si hacen bien las cosas y no se dejan mangonear por nadie y sabiendo bien con quien se juegan los cuartos y sabiendo decir no a quien abusa, a quien no le defiende y a quien busca otros intereses diferentes a los del transporte.

Más artículos de opinión de Camionero García  Prohibida su reproducción y copia parcial o total sin el permiso expreso y por escrito del autor y el editor.

Foto de archivo