Opinión

Murcia y su huelga. Opinión de Tomás Navarro

Murcia y su huelga. Opinión de Tomás Navarro
Imagen de la huelga en Murcia
Murcia y su huelga. Opinión de Tomás Navarro

En el ecuador de la huelga de transportes de la Región de Murcia, aparecen luces y sombras, aparece una patronal con un perfil antisocial que deja en evidencia las falsas afirmaciones del Señor Perezcarro, de que la FROET cuida a sus trabajadores, y aparecen claros síntomas del poder para influenciar en los medios de comunicación, así como extrañamente aparecen antidisturbios donde no hay problemas, y se disuelven piquetes informativos alegando medidas covid.

Por otro lado, una parte de los trabajadores, están demostrando su falta de cuestionamiento ante el convenio al que están sometidos, por falsas promesas e incumplimientos de la patronal que tanto dice protegerlos, y todos sabemos que la aceptación de lo impuesto sin cuestionar nada, es la antítesis de los avances sociales.

Murcia, como podría ser Albacete, Huesca o Cuenca, tienen su convenio y todos ellos parten de la misma base: La normativa europea 561/2006 y el Real Decreto 1561/1995 de jornadas especiales, ahora la pregunta sería, ¿Cumple el convenio de Murcia con estas reglas?.

La respuesta es muy clara, no. La FROET, mantiene desde el siglo pasado que el pago por kilómetros es para compensar las posibles horas de presencia y trabajo efectivo, y se basa en que no se puede saber cuántas horas está un conductor a disposición de la empresa, pero esto no es cierto, y la realidad es que con el pago por kilómetros están dejando de pagar el trabajo de presencia que el conductor realiza, y por ende defraudando a Hacienda.

La huelga de Murcia es la punta del iceberg, es la parte visible de un problema de mucho calado en donde los trabajadores no tienen nada que perder, puesto que ya lo llevan perdiendo durante muchos años, tantos como tiene el Real Decreto 1561/ de 1995, y sin embargo si tienen muchísimo que ganar.

Cabría hacerse muchas preguntas sobre la huelga, su repercusión a escala nacional, o sobre su seguimiento, pero de lo que no cabe ninguna duda es, que el resultado final de este cuestionamiento de posiciones empresariales inamovibles, va a marcar un antes y un después en las relaciones laborales, en definitiva, lo que ocurra en Murcia nos va a afectar a todos, tanto en lo bueno como en lo malo.

Foto de archivo