¡¡La lucha sigue!!. Opinión de José Vicente Busta Cofiño

Seguimos en la trinchera enfrente a la opresora patronal, esa que encarnada en patroncitos “familiares” cubren sus ínfulas dictatoriales con un manto de bondad y acogimiento.

Estos dias aprovechando la actual coyuntura que me lleva a estar más tiempo sin trabajar después de un lamentable accidente laboral, son muchos los compañeros de fuera de mi empresa, los que más, que llaman interesándose por mi estado. Hablando con algunos coincidimos en el nivel de importancia que somos los asalariados para esa patronal que su único interés en el transporte es enriquecerse de forma rápida y despiadada a costa de vulnerar los derechos más básicos del obrero, por ejemplo las dietas.

Es al menos para pararse a pensar cómo el hecho de reclamar nuestros derechos, esos que la propia patronal rúbrica en forma de firma en los convenios laborales, puede llevar al obrero al más absoluto ostracismo laboral e incluso social.

Esa es la formación empresarial de la gran mayoría de "patronzuelos" del sector, esos que las ínfulas dictatoriales les babean por la comisura de los labios cual hiena hambrienta detrás de la presa más débil oprimiendo al asalariado para mantener la empresa en base de ganancias siempre, desconociendo que el salario del obrero es el coste laboral del camión y por ende de la propia empresa. Obviar eso, es la certificación de que su única intención es enriquecerse vulnerando los derechos más básicos del obrero. Eso si, a la hora de pedir profesionalidad entre sus asalariados se ponen dignos y notorios, incluso intransigentes con quien comienza su andadura laboral.

Condenar al más absoluto ostracismo para esa despiadada patronal, es más fácil de lo que le resulta al propio obrero salir de esa situación, porque esta especie de “familiar” patronal utiliza la sumisión y ayugamiento del resto de compañeros para crear ese ambiente hostil, incluso llegando a descolgar el teléfono para insinuar la negativa a responder a llamadas de según qué compañero y su situación en la propia empresa.

Este es el plantel de esa patronal disfrazada con más capas que las propias cebollas y el mismo poder para odiarlas cada vez que se acerca uno a ellas.En la patronal del transporte el panorama es ese: o entras en su aro o pasas automáticamente a ser ese “listillo sindicalista rojo de mierda, que quiere ganar en los juzgados lo que no es capaz a ganar trabajando” como si los jueces estudiaran para prevaricar a favor de los obreros.

Mientras no alcemos todos al unísono el cuello, que les sea más difícil colocarnos el yugo, hagámosle caso a Miguel Hernández cuando dice:    

“Los bueyes doblan la frente,
impotentemente mansa,
delante de los castigos:
los leones la levantan
y al mismo tiempo castigan
con su clamorosa zarpa.”.

Hagamos valer nuestros derechos, defendámoslos pues ellos son la certificación de la necesaria dignidad para el sector del transporte, luchemos contra esa patronal que condena a quien levanta su frente contra el yugo de la esclavitud, hagamos que tomen de su propio veneno, el ostracismo, ese que tanto le gusta ensañarse contra quien osa reclamar sus derechos, que  cuando un patrón llame a sus ayugados para aislar a un compañero encuentre delante la negativa rotunda de una masa enforverecida de rebeldia.

El asalariado en el transporte no está regido ni sujeto  por normativas sobre tiempos de conducción y descansos de la Comunidad Europea, esas que tanto empeño y afán  pone la patronal en hacer valer, nuestros derechos están legislados por ley en el Estatuto de los Trabajadores y convenios afines, lo demas son adoctrinamientos de esa patronal que lo ultimo que le interesa y le importa es el bienestar del propio obrero, pilar fundamental de su empresa.

Por ende, desde #CNTTTransportesLaFelguera.com iniciamos una campaña de apoyo mutuo y solidaridad  para hacer frente unísono a las opresiones que desde la patronal ejercen hacia el asalariado, no debemos doblegar sino al contrario, debemos levantar la frente y así les sea imposible ayugarnos. ¡¡SALUD!!.

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