¡Rompamos con lo que nos divide, apostemos por lo que nos une!. Opinión de José Vicente Busta Cofiño
La clase obrera siempre fue luchadora,defensora de sus derechos entre otros motivos porque sabemos lo que cuesta conseguirlos, otra cosa muy diferente es saber lo que es disfrutar de ellos, ello gracias a la empatía de quienes luchan lo disfrutan incluso quienes se atreven a menospreciar su cometido, pero la lucha obrera siempre fue, es y será así de empática y no menos solidaria.
Por eso el obrero debe de huir de la verticalidad, de quien se postule como su defensor, el obrero y su lucha tiene herramientas de sobra para su cometido, debe de huir de la verticalidad de aquellos estamentos que hacen del sindicalismo su particular cortijo clientelar, clientelar para sus intereses y clientelar para quien, desde política que actualmente hay busca gracias al obrero postularse como merecedor del apesebrado sillón salvanóminas.
Hacer sindicalismo dejando de lado al propio obrero es la máxima a día de hoy para quienes buscan, según sus propios actos, algo más que defender y mejorar los derechos del obrero, para ello y sacando el aplastante rodillo eliminan la asamblea obrera, limitando esta a sus liberados, una asamblea donde el obrero se hace fuerte es el mayor de los enemigos de la opresora patronal y de un sistema cómplice de dichos opresores.
Una asamblea debe ser fuerte, para ello tiene en la dignidad del obrero su mejor aliada, su músculo asambleario es el propio obrero y su compromiso de lucha, una decisión tomada por la asamblea es la máxima a seguir por sus delegados sindicales, alejándose de la verticalidad de sindicatos burócratas, buscando siempre la horizontalidad y flexibilidad que aporta la asamblea.
Las secciones sindicales de la CNT hacen que la clase obrera unida sea fuerte, dando voz a sus necesidades, sin que nadie ni ningún organigrama posible pase el rodillo, la sección sindical lleva implícita la fuerza y músculo de la asamblea, y con la fuerza de la asamblea detrás y no hay excusa posible para no defender y mejorar nuestros derechos, ya no sirve ni llorar por las barras de los bares cuando no se envalentona diciendo que él tiene sus problemas con el AMO solucionados, el amo no negocia, explota, explota sin piedad hasta la extenuación del propio obrero, y cuando este no rinde bien sea por vejez y, enfermedad o incluso por meramente reclamar lo que es suyo sin piedad cuál tornillo viejo lo deja caer poco menos que en la cuneta,.
Así que seamos valientes, utilicemos las herramientas a nuestro alcance, que las tenemos y muy buenas y luchemos por lo que es nuestro, por nuestros derechos, dejémonos ya de criticar lo que hace la opresora patronal para llenar sus tripas sin dolor alguno y plantemos cara a la opresora patronal y sus cómplices, entre ellos papá estado, quien vela por que todo siga igual aunque siempre seamos los mismos quienes paguemos los platos rotos del festín.
Dejémonos de cortapisas y excusas baratas e infantiles y luchemos por mantener nuestros derechos y a la vez por su mejora, ¡¡Rompamos con lo que nos divide, apostemos por lo que nos une!!.
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