Opinión

Prefiero una buena cabina a un motor de 500 CV. La opinión de Salvador Egea Llull

"Personalmente para aceptar un trabajo, exijo una cabina confortable, no pido 500 cv, carenados, cromado, colchón viscoelástico.."
Foto de archivo
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Prefiero una buena cabina a un motor de 500 CV. La opinión de Salvador Egea Llull

Reza un dicho que dice, has ganado la batalla, pero no la guerra. Algo similar se podría aplicar a nuestro sector. El mismo es un campo de guerra en el que se lucha todos contra todos y el objetivo a batir es el beneficio.

Los hay que mueren, los hay que sobreviven heridos de por vida y los hay que vencen por fuerza o por astucia, o por ambas. Cuando se habla de transporte y de su dolencia, la cual en estos momentos está enfocado el objetivo de la cámara que filma, la situación con la falta de conductores, el público en general piensa en camiones y gente que los conduce.

No se les puede culpar, obviamente conocen de esto lo que ven o lo que les cuentan. Como todo, dentro del mismo hay segmentos, hay tipos de transporte, hay requerimientos especiales, hay variedad, aunque todos confluyen en mismos puntos comunes, como conducir, estibar, transportar de un punto a otro, etc.

No es lo mismo un frigo que una lona, una lona que una cisterna, una cisterna que una gravera, una gravera que una plataforma abierta, una abierta que un cajón con portones, etc. Pero ello solo lo conocemos los de dentro. Este es un sector con muchos frentes y ramificaciones abiertas y muchos se quedan por motivo equis, en un solo tipo de transporte. Las diferencias son sencillas de aprender porque lo único que has de saber es como funciona el sistema de trabajo con el tipo de carga en cuestión.

Actualmente desconozco como está el patio y si alguien que necesita conductor de cisternas aceptaría a un señor con más de 40 años o 30 o 20 en el sector pero que nunca ha tocado una. Digo esto porque es habitual y ha sido de siempre solicitar preferencia de conocimiento en el tipo de transporte a realizar, capando al individuo de desarrollarse y continuar trabajando dentro del mismo sector.

Habrá de todo y no quiero con esto decir que no sea así, decir esto solo me sirve como excusa o entradilla al tema en concreto que es el asunto de los portacoches. Parece ser, valga mi desconocimiento, que este sector dentro del sector transporte, está adoleciendo doblemente, tanto la falta general de conductores, así como la falta de personal “calificado” entre comillas, para ocupar tal puesto.

Personalmente, y mi opinión o mis anhelos a nadie os importa, lo sé, he sido una persona que siempre le ha encantado probar otros medios de transporte. No he ido dando saltos de flor en flor como dicen los jóvenes sexualmente activos, si no, que nunca he echo ascos a nada y siempre me ha tentado el conocimiento de acceder a más.

Ahora bien, tanto si llevamos frigo, como si es lona, como si es bañera, portacontenedores o furgoneta, tanto da, podemos decir que todo es una mierda, que todo está mal, que lo mejor es dormir en casa, etc. Aun con todas estas, estamos mucho mejor que quienes deben llevar el portacoches o portacamiones, tanto da nuevamente. Estamos mejor en condiciones humanas, y habrá quien me lo quiera debatir, estoy de acuerdo.

2 metros cuadrados no es vida, pero si te ofrecen echar a andar en un vehículo de estos, ¿aceptarías? Personalmente para aceptar, exijo una cabina confortable, no pido 500 cv, carenados, cromado, colchón viscoelástico. Pido una cabina en la que mínimo, cuando me levanto, pueda ponerme de pie y vestirme como una persona normal.

Pido tener espacio para llevar mi ropa y mis utensilios que necesito como persona para desempeñar la labor que me exiges, puesto que tengo que estar fuera de mi casa varios días. Si una cabina normal ya resulta agobiante, la vemos pequeña, falta de espacio y demás, ¿como se debe sentir quien va al volante de estos vehículos? En serio, yo siempre me lo he preguntado. Vale, recuerdo ir con mi padre en un viejo MAN de techo plano, con la palanca de cambio que apenas te dejaba hueco para pasar al centro, con el túnel del motor a la altura de tus rodillas, la cama al mismo nivel, la litera estrecha, donde no podías ponerte de pie, e íbamos 4 personas. Si, una locura, padre, madre, hermana y quien escribe.

Aquellos tiempos pasaron y por suerte a mejor, por ende, si el trabajo que efectuamos ya de por sí es dificultoso, nos acarrea trastornos y enfermedades reconocidas o no, que le puede acarrear a quien lleva toda la vida metido en una cabina así, cual perro en transportin cuyo viaje no termina nunca. Nos pasamos el bienestar del conductor, de la persona, por los santos cojones en pos de portar un vehículo más de carga, que es ahí donde está el dinero.

Lo mismo para las cabinas chatas de los camiones con remolque que portan la cama arriba, en ese ataúd, el cual quiera que no te pase nada y te pille dentro de el, porque para salir de urgencia te las vas a ver putas. Disculpad el vocabulario, pero es que uno se enciende. Porque no hacen mas que pedir, pedir y pedir. Pero no ofrecen nada, porque como todos sabemos no solo es tema de dinero y de hacer esto atractivo. Es tema también de humanidad.

Desde aquí solo recordar que hay gente que como yo, también cae en la cuenta de estos casos y espero que la situación cambie temprano, porque aun habiendo escasez en el sector portavehículos, todos los anuncios que he visto, exigen tener experiencia en el sector. Si a pesar de que la situación la pintan calva para el transporte general, este tipo de empresas se cierran más en banda con exigencias adicionales, suerte les deseo.

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