Tres personas trabajadoras de la empresa de transporte de viajeros Interbus Arriaga han sufrido cuatro agresiones físicas en los últimos seis meses durante su turno de trabajo. CCOO denuncia esta deriva, pide a la empresa más medidas de prevención y reclama que las actitudes violentas no tengan cabida en la sociedad.
Este mismo 15 de agosto, en Tafalla, un trabajador sufrió el acoso y la violencia de un hombre que persiguió al conductor hasta la cafetería donde este realizaba su descanso ordinario.
Visto el momento de peligro, el profesional del transporte se refugió en el autobús y el agresor abrió la puerta por medio del sistema de emergencia. Allí propinó un golpe en el vientre del trabajador. Los hechos ya están denunciados ante la Policía Foral.
Pese a que la empresa cuenta con un protocolo en caso de agresión, las personas trabajadoras reclaman un sistema que evite cualquier tipo de vulneración de la integridad para los profesionales, tanto física como mental. Además, tal y como denuncian las propias personas trabajadoras de la empresa, las amenazas verbales son una constante en este sector.
Esta cadena de agresiones en el transporte se suma a las denunciadas por este mismo sindicato en otoño de 2024.
Para CCOO, es prioritario que las personas trabajadoras sientan que su puesto de trabajo es un lugar seguro. Para ello, el sindicato reclama medidas concretas como mamparas en el habitáculo del conductor o un sistema de auxilio que se active pulsando un botón.
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