EFE.- Los transportistas de Tarragona amenazan con protestas el próximo 11 de octubre si antes no se reúnen con el Ministerio de Fomento y la Generalitat para tratar los desvíos obligatorios de la N-340 a la AP-7.
La Federación Empresarial de Autotransporte de Tarragona (FEAT) informa de que las movilizaciones serán «contundentes» si no hay una mesa de negociación con las dos administraciones para tratar de los «graves perjuicios» que ocasionan los desvíos al sector.
Desde el pasado domingo 2 de septiembre, los camiones de cuatro o más ejes deben desviarse obligatoriamente de la N-340 a la AP-7 entre Alcanar (Tarragona) y Vilafranca (Barcelona) y de la N-240 a la AP-2 entre Montblanc (Tarragona) y Les Borges Blanques (LLeida).
Los camiones tienen un descuento del 50 % del peaje -el Ministerio de Fomento compensa a las concesionarias por estas bonificaciones-, pero la patronal FEAT reivindica que los desvíos «solo son aceptables si no conllevan el pago de ningún peaje».
La patronal se queja de que les ignoraron en la fase de negociaciones y ahora quieren que se les tenga en cuenta, ya que la medida les obliga a dar rodeos que, según ellos, no han previsto las administraciones.
El director de la FEAT, Josep Lluís Aymat, sostiene que si es obligatorio desviarse «no puede hablarse de bonificación, sino de otro coste más para el sector». Los desvíos, señala la FEAT, también han perjudicado a las empresas a pie de la N-340, que se han visto privadas de un gran volumen de clientes de golpe. (Foto de archivo)
Se eliminarán los comentarios que contengan insultos o palabras malsonantes.