Las perspectivas de un aumento en la disponibilidad de la capacidad de transporte de contenedores como resultado de la reanudación del tráfico a través del Canal de Suez se volvieron más lejanas en las últimas cuarenta y ocho horas.
A pesar de las declaraciones previas sobre el cese de los ataques al transporte marítimo, el movimiento hutí en el norte de Yemen ha continuado amenazando a los buques que transitan por el Mar Rojo y el Golfo de Yemen y sus alrededores. Esto provocó un nuevo ataque por parte de Estados Unidos.
En un comunicado emitido el 17 de marzo, el Departamento de Defensa estadounidense declaró que «las fuerzas del Comando Central de Estados Unidos iniciaron una serie de operaciones consistentes en ataques de precisión contra objetivos hutíes respaldados por Irán en todo Yemen para restablecer la libertad de navegación y la disuasión estadounidense».
Los ataques aparentemente consistieron en bombardeos y ataques con misiles contra instalaciones hutíes de diversos tipos, que, según el Departamento de Defensa estadounidense, incluían «sitios de entrenamiento terrorista, infraestructura para vehículos aéreos no tripulados, instalaciones de fabricación de armas e instalaciones de almacenamiento de armas».
En respuesta, los hutíes lanzaron ataques esporádicos contra las fuerzas navales estadounidenses y emitieron un comunicado aclarando su postura. Publicado por el servicio de prensa hutí, el comunicado afirmaba que «tras el vencimiento del plazo establecido por los líderes en Saná para que los mediadores presionaran al enemigo israelí a fin de que permitiera la entrada de ayuda humanitaria a Gaza —donde la población civil lleva más de 15 meses enfrentando una catástrofe humanitaria sin precedentes debido a la agresión sionista—, las Fuerzas Armadas de Yemen anunciaron la reanudación de la prohibición de la entrada de todos los barcos israelíes». En los últimos años, la definición de «barcos israelíes» por parte de los hutíes ha sido bastante amplia.
Parece lógico suponer que los problemas en el Mar Rojo distan mucho de resolverse. Se ha sugerido, en particular por parte del Gobierno estadounidense, que los ataques hutíes son una expresión de la agresión iraní contra Estados Unidos.
También se ha sugerido que el movimiento hutí se beneficia del dinero que pagan algunos armadores para garantizar el libre paso de sus buques.
Los acontecimientos más recientes parecen indicar que la amenaza de ataques hutíes será indefinida, lo que muy posiblemente provocará que el Canal de Suez quede inutilizable para el tráfico importante de contenedores durante lo que resta de año.
En un mercado de transporte de contenedores caracterizado por la caída de las tarifas de flete, esto ofrece cierto soporte a los precios. Sin embargo, parece implicar que la incertidumbre sobre la situación de un aspecto importante del mercado de transporte de contenedores continuará a largo plazo.
Fuente: Ti Insight
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