La historia de la escasez de conductores en Reino Unido sigue evolucionando. Desde el Informe de Habilidades realizado por la Asociación de Transporte por Carretera (RHA), a principios de este año, que destacó la necesidad de 40,000 nuevos conductores de vehículos pesados al año, los nuevos datos sugieren que se pordrían haber perdido más de 117,000 conductores calificados en solo 12 meses. Esa cifra incluye un número sorprendente de personas de entre 30 y 40 años, no solo jubilados.
Prácticamente todos los transportistas con los que hablaron informaron de una creciente escasez de conductores a niveles no vistos desde la pandemia, y la situación actual es la culminación de múltiples problemas que se han estado acumulando durante años. Entonces, ¿qué está pasando
Se está viendo un cambio
Los nuevos conductores tienen dificultades para obtener puestos permanentes, a menudo bloqueados por los costos del seguro. Los DQC vencidos pueden reflejar un problema más profundo: los conductores se van porque sienten que el sistema no funciona para ellos. La capacitación es cara y está fuera del alcance de muchos, y los campamentos de entrenamiento financiados a nivel nacional se han retirado, por lo que el sector se encuentra fuera de las prioridades gubernamentales clave como la Estrategia Industrial.
Si bien es cierto que, en general, los sectores especializados, como el transporte de cisternas, se ven mucho menos afectados, para el mercado general los simples aumentos financieros en las tarifas por hora no solucionan el problema, los problemas más profundos son más profundos.
La prioridad del precio se ha impuesto en la industria prácticamente como algo normal por parte de los transportistas durante décadas, lo que ha generado una visión a corto plazo entre las grandes empresas que aceptan los contratos más importantes y una erosión de los ya de por sí reducidos márgenes de los transportistas más pequeños. Esto genera vulnerabilidad en la cadena de suministro y riesgo para estos mismos transportistas a medida que se reduce la capacidad de transporte.
El transporte de mercancías por carretera del Reino Unido no puede seguir dependiendo únicamente de los aumentos salariales para atraer y retener talento, especialmente cuando los operadores se enfrentan a un aumento generalizado de los costes.
En cambio, necesita reincorporar a los conductores cualificados cuyas credenciales han caducado. «Necesitamos invertir en vías de entrada que funcionen para nuevos conductores y empleadores. Y debemos asegurar un apoyo a la formación sostenible que refleje la importancia de la logística para nuestra economía». señala el informe de la RHA.
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Se trata de crear las condiciones para que la gente vea la conducción como una carrera respetada y a largo plazo. Esto implica una reflexión conjunta de la industria, el gobierno y el sistema de competencias en general. La economía del Reino Unido depende en gran medida de un sólido grupo de conductores de vehículos pesados (HGV) para garantizar la fluidez de las cadenas de suministro y la entrega de mercancías.
Los conductores de camiones son la columna vertebral de la cadena de suministro. Entregan artículos esenciales como alimentos, medicamentos, combustible y materiales para la industria manufacturera y la construcción. El 81 % de toda la carga en el Reino Unido se transporta por carretera. Mantener un suministro constante de mercancías a hogares, hospitales, comercios minoristas, fábricas y consumidores no solo ayuda a evitar interrupciones que pueden repercutir en toda la industria, sino que también impulsa la economía.
Sin embargo, el sector logístico se enfrenta a importantes desafíos estructurales, como la contratación y retención de conductores y el envejecimiento de la fuerza laboral, que amenazan la estabilidad económica y la resiliencia de la cadena de suministro.
El informe ofrece un pronóstico único sobre las necesidades de conductores de vehículos pesados:
«Nuestro pronóstico muestra una necesidad de 40.000 nuevos conductores de vehículos pesados cada año durante los próximos cinco años, lo que supone un total de 200.000 nuevos conductores durante el mismo período. Para lograrlo, durante los próximos cinco años, la DVSA deberá realizar un promedio de 73.000 exámenes de conducción anuales. Tanto el gobierno como la industria deben seguir enfocándose en garantizar que tengamos la fuerza laboral de conductores de vehículos pesados necesaria para satisfacer las futuras demandas económicas.
El informe examina la fuerza laboral actual de conductores de vehículos pesados, su demografía, así como el impacto del clima económico actual y los indicadores futuros del volumen de carga, incluyendo las estimaciones mensuales del PIB, las ventas minoristas, la producción manufacturera, la construcción y las importaciones y exportaciones. La inflación ha reducido el volumen de carga, que se ha visto aún más afectado por el aumento de los tipos de interés.
El Reino Unido necesita contratar 200.000 camioneros en los próximos cinco años
La salida del Reino Unido de la UE, la pandemia y la crisis del coste de la vida han afectado al volumen de transporte de mercancías. Con el nuevo enfoque del Gobierno británico en la construcción de viviendas, los conductores de vehículos pesados desempeñarán un papel fundamental para alcanzar el objetivo de construir 1,5 millones de viviendas en 5 años, por lo que aumentar la plantilla de conductores es esencial para satisfacer esta necesidad.
El informe también examina cómo ha cambiado el número de conductores activos e inactivos durante la última década en cada región. Hay 684.000 conductores de vehículos pesados activos, según el número de conductores que poseen una Tarjeta de Calificación de Conductor (DQC) válida. El número de conductores con un DQC proporciona la medida más precisa del número de conductores activos.
La plantilla de conductores de vehículos pesados también está compuesta desproporcionadamente por hombres mayores, con tan solo un 1,6% de menores de 24 años y tan solo un 2% de mujeres. La diversidad étnica es baja: el 83% de los conductores se identifica como «británicos blancos», en comparación con el 74% en otros sectores.
2021 fue un año de auténtica crisis con una escasez de conductores de vehículos pesados que provocó vacíos en los comercios, retrasos en las entregas e interrupciones en la cadena de suministro. Debemos evitar que esto se repita».
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